8/6/14

Otros santos





 Para los que no son (somos) especialmente partidarios de los santos del calendario gregoriano han surgido otros alternativos y me apunto a ellos. Desde San Internet a San Google pasando por Santa Wikipedia, San g-Mail, San hotmail, etc... hay tantos que llenan de sobra los 365 días del año.

 Hay algunos que celebro con mucha devoción y a ellos dedico mis oraciones informáticas cada mañana. Mi preferida es Santa Copiar y Pegar. Sin su intervención no sé qué sería de mi. Porque San Nepomuceno haría algún milagro, sería mártir, virgen o algo así pero eso yo  apenas lo noto. Sin embargo éstas lineas las escribo tumbado a la bartola viendo una puesta de sol increíble y luego invoco con los dedos a San Seleccionar, después a Santa Copiar y Pegar (en mi argot interno tiene el apodo de Control C y Control V) y, sin levantarme, lo subo al blog tan ricamente. Eso si que son milagros de verdad y sus autores deberían tener alguna capilla en las estanterías de las casas.

 En mi top ten de santos están San Archivo-Guardar y su hermano gemelo univitelino San Guardar-Como. También los santos Abrir, Hibernar, Enviar a, san Con Copia A, etc....

 Hoy he descubierto a una santa que ha hecho el milagro de ahorrarme unos euros cada mes. Se llama Santa Agenda Electrónica y viene conmigo a todas partes en el bolsillo como mi ángel de la guarda metida dentro de San Teléfono móvil.  Es todo un mundo por descubrir y ya sé que hace milagros constantemente. Acaba de hacer uno: ha encontrado, mediante su poder mágico de "buscar", el correo de alguien que estaba pinchado en un corcho frente a la mesa. Si eso no es un milagro que baje dios y lo vea.

 Frase corta (escrita con un dedo sobre Santa Pantalla táctil): "Selecciona todo esto de aquí arriba, pon los acentos que faltan porque a mi me da pereza,  cópialo, piratea alguna imagen o invoca a San Pantallazo, sùbelo todo al blog y luego te apagas tu solita  que yo me voy a merendar". (proverbio ruso)

 Enviado desde mi iPad.
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(Pd. Lo de arriba lo creo firmenemente, pero hay un santo especial, de los de toda la vida, que es San Francisco Javier, y a ese que ni me lo toquen. Sobre él escribí algo hace tiempo y, usando a Santa Copiar y Pegar, lo reproduzco aquí para quién no tenga ganas de buscarlo. Buenas Tardes:



Desde pequeño sé que, para mi, el día más importante del año es el de mi santo. Lo de celebrar los cumpleaños era (y en mi inconsciente sigue siendo) cosa de protestantes, extranjeros o rojos. Ese día me hacían regalos y me preparaban mi postre preferido: tarta de galletas empapadas en almibar y unas gotas de moscatel con nata en capas sucesivas. Desde entonces sigo celebrándolo aunque a mi manera.

Luego supe que mi santo, San Francisco Javier, nació en el Castillo de Javier, cerca de Pamplona, el 7 de abril de 1505, y que es el autor de la famosa frase (corta): "¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo si pierde su alma?". También que es el patrón de los misioneros y el apóstol de Las Indias.

Hoy me entero de que (copio y pego): “El más sorprendente de todos sus milagros fue el que le sucedió durante una tempestad que duró tres días, estando constantemente y al mismo tiempo en dos buques. Uno de ellos estaba a ciento cincuenta leguas del otro, y sirvió de piloto a los dos al mismo tiempo. Comprobaron este milagro todos los pasajeros, que no podían engañar ni ser engañados”.

También era famoso porque, al llegar a un país del Extremo Oriente, lo primero que hacía era decirle al rey que eso de tener tropecientas concubinas (algunos hasta 10.000) era una marranada. Las echaba a todas fuera del palacio y, las pobres, que hasta entonces vivían estupendamente sin dar ni golpe, tenían que ganarse la vida como podían. Las malas lenguas dicen que hizo más por fomentar el negocio más antiguo del mundo en aquellas tierras que el hambre y la pobreza. Otros atribuyen a este hecho su éxito como misionero.

Y es que en estos tiempos tan revueltos, en los que, según el último libro del papa Benedicto, han desaparecido el buey y la mula del portal de Belén y que los Reyes Magos ya no vienen de Oriente sino de Huelva, uno necesita algo a lo que agarrarse. Y yo lo hago volviendo mentalmente al paraíso de la infancia, aunque solo sea por unas horas.

Frase corta: “ Gracias a los que me han felicitado por mi santo, en especial a Angelines, que no falla nunca”. (yo)




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